En el pasado, la gravedad de las consecuencias ha llevado a los países a suspender los planes para acelerar la construcción de centrales nucleares y comenzar a reducir su uso. Pero el año pasado, la energía nuclear volvió a cobrar impulso.
Por un lado, el conflicto entre Rusia y Ucrania ha provocado cambios en toda la cadena de suministro energético, lo que también ha animado a muchos “renunciantes a la energía nuclear” a abandonarla uno tras otro y reducir al máximo la demanda total de energía tradicional reiniciando la energía nuclear.
El hidrógeno, por otro lado, es fundamental en los planes de descarbonización de la industria pesada en Europa. El auge de la energía nuclear también ha impulsado el reconocimiento de la producción de hidrógeno mediante energía nuclear en los países europeos.
El año pasado, un análisis de la Agencia de Energía Nuclear (AEN) de la OCDE titulado “El papel de la energía nuclear en la economía del hidrógeno: costos y competitividad” concluyó que, dada la actual volatilidad de los precios del gas y las ambiciones políticas generales, la perspectiva de la energía nuclear en la economía del hidrógeno es una oportunidad importante si se toman las iniciativas adecuadas.
La NEA mencionó que la investigación y el desarrollo para mejorar la eficiencia de la producción de hidrógeno deben incrementarse a mediano plazo, ya que “la pirólisis de metano o el ciclo químico hidrotermal, posiblemente combinados con la tecnología de reactores de cuarta generación, son opciones prometedoras bajas en carbono que pueden reducir la demanda de energía primaria para la producción de hidrógeno”.
Se entiende que las principales ventajas de la energía nuclear para la producción de hidrógeno incluyen menores costos de producción y reducción de emisiones. Mientras que el hidrógeno verde se produce utilizando energía renovable con un factor de capacidad del 20 al 40 %, el hidrógeno rosa utiliza energía nuclear con un factor de capacidad del 90 %, lo que reduce los costos.
La conclusión central de la NEA es que la energía nuclear puede producir bajos niveles de hidrocarburos a gran escala y a un costo competitivo.
Además, el Organismo Internacional de Energía Atómica ha propuesto una hoja de ruta para el despliegue comercial de la producción de hidrógeno nuclear, y la industria cree que la construcción de una base industrial y una cadena de suministro relacionada con la producción de hidrógeno nuclear está en marcha.
Actualmente, los principales países desarrollados del mundo están llevando a cabo activamente la investigación y el desarrollo de proyectos de producción de hidrógeno mediante energía nuclear, con el objetivo de incorporarse a la economía del hidrógeno lo antes posible. Nuestro país promueve activamente el desarrollo de la tecnología de producción de hidrógeno a partir de energía nuclear y ha entrado en la fase de demostración comercial.
La producción de hidrógeno a partir de energía nuclear utilizando agua como materia prima no solo elimina las emisiones de carbono en el proceso de producción, sino que también expande el uso de la energía nuclear, mejora la competitividad económica de las centrales nucleares y crea las condiciones para el desarrollo armonioso de estas y las energías renovables. Los recursos de combustible nuclear disponibles para el desarrollo en la Tierra pueden proporcionar más de 100.000 veces más energía que los combustibles fósiles. La combinación de ambos allanará el camino hacia el desarrollo sostenible y la economía del hidrógeno, además de promover el desarrollo y un estilo de vida ecológicos. En la situación actual, presenta amplias perspectivas de aplicación. En otras palabras, la producción de hidrógeno a partir de energía nuclear puede ser un componente importante del futuro de las energías limpias.
Hora de publicación: 28 de febrero de 2023
